Esta temporada no ha sido la mejor para Red Bull Racing, que ha batallado para encontrar el compañero ideal para Max Verstappen tras la salida del mexicano Checo Pérez. Ni Liam Lawson ni Yuki Tsunoda han estado a la altura de lo que logró hacer el tapatío como segundo volante del equipo austriaco.
En una reciente entrevista con Memo Rojas, Checo confesó que alguien dentro del equipo le reveló que lo extrañan. Al ser cuestionado sobre si merecía una disculpa por la forma en la que salió de Red Bull, Pérez aseguró que no.
“Al final el deporte es así y se tomaron decisiones porque hubo demasiada presión que ellos mismos generaron. Pero yo sé que muy en el fondo están arrepentidos y lo sé de muy buena fuente… En un multiverso (regresaría a Red Bull), pero es muy complicado", declaró en el podcast Desde el Paddock.
Lee también Checo Pérez aún no define su futuro en la Fórmula 1; ¿Qué opciones tiene?
Contrario a los rumores que aseguraban que Checo y Verstappen tenían mala relación, el mexicano aseguró que son buenos amigos, mismo motivo por el cual no se alegra por el mal presente de Red Bull, que ocupa el cuarto lugar en el campeonato de constructores de la F1.
“Tengo muy buenos amigos ahí, la gente piensa que me da gusto (que les vaya mal), pero para nada, Max se merece todo el éxito y tener un coche competitivo porque es un pilotazo, muy pocos conocen la forma en que trabaja. Teníamos un equipazo que poco a poco se fue derrumbando” agregó.
No obstante, reconoció que no fue protegido por el equipo ante las críticas de la prensa.
“También yo era un punto importante, porque cuando firmó contrato en Mónaco, todos hablaban de mi futuro. Tan fácil que como hubiera sido que el equipo me protegiera, pero no fue así. Ya nadie hablaba de otras cosas más que de mi. Había mucha presión en mi lado del garaje y eso llegaba a los ingenieros, eso nos terminó costando mucho”, mencionó.
Lee también Carlos Slim confirma ofertas por Checo Pérez en F1; espera pronto buenas noticias

Finalmente, habló sobre los problemas que sufrió a raíz de la diferencia que había entre el coche de Max Verstappen y el suyo.
“En el 2023 empezamos con un muy buen coche para ambos pilotos, iba peleando el campeonato con Max carrera a carrera, pero llegamos a Barcelona con los ajustes y en la primera práctica me quedé 1 segundo atrás, luego a 7 décimas y todo empezó a ser muy complicado. (...) Pude adaptarme al coche de inicio, pero cuando me llegaba una variante del viento, la lluvia o cualquier cosa del clima era incontrolable porque tenía que manejar el Red Bull muy presente, cuando los pilotos lo hacemos todo en automático. El mismo Max se los dijo, tomaron esta dirección que a mí me resultó cada vez más difícil” concluyó.