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Iván Terrazas ha sido testigo del crecimiento que ha tenido la afición de los Diablos Rojos del México en la capital, tras quedarse como la única organización que radica en la Ciudad de México.
El Terri atestiguó los llenos en el Foro Sol, fue protagonista de la intimidad en el estadio Fray Nano y fungió como anfitrión de la llegada de nuevos aficionados en el Alfredo Harp Helú. De todos los inmuebles guarda gratos recuerdos, pues lo vieron pasar de joven pelotero a directivo de la organización, con una histórica capitanía.
Cuando los Tigres visitaban la Ciudad de México, en la década de 2000, Terrazas confesó haber sido impactado por los llenos que se presentaban en el Foro Sol. “Te temblaban las piernas antes del juego, porque ya veías el estadio lleno. Era impresionante”, recuerda, en entrevista exclusiva con EL UNIVERSAL Deportes.
Pero el regreso de la Ciudad de México al calendario de la Fórmula Uno obligó a los Pingos a encontrar nuevo hogar.